¡Mire mire que locura, mire mire que emoción, sáquense la camiseta, désenla a Palermo que juega mejor! ¡Si! Señoras y señores, el Guinness-man del fútbol argentino, desafió a la lluvia, metió el gol agónico frente a los de la 1-11-14 y logró algo que ningún jugador del mundo consiguió: Hizo llorar nada más y nada menos que a Diego Armando Maradona. Un crack.
Minuto 92. Los peruanos, que ya estaban eliminados del Mundial, festejaban el agónico empate frente a un seleccionado que en monedas vale mucho, pero en sentimiento es más frío que el Iceberg que hundió al Titanic. ¿Acaso Messi no tendría que defender los colores de España? Sacando al galgo Gutiérrez, a Mascherano, que a pesar del grave error que cometió en el uno a uno sigue siendo un “león”, y el “pipita” Higuaín que demostró que de francés no tiene ni la uña del dedo meñique, los demás dejaron (ya hace tiempo lo vienen haciendo) mucho que desear.
Cuando parecía que el pasaje para Sudáfrica era sólo para ir de visita, apareció él. El interminable, el inmortal Martín en medio de una lluvia torrencial, para empujarla y hacer delirar a todo un pueblo (sí señor lector, a hinchas de River también), que hasta ese momento, ardía en llamas.
Minuto 92. Los peruanos, que ya estaban eliminados del Mundial, festejaban el agónico empate frente a un seleccionado que en monedas vale mucho, pero en sentimiento es más frío que el Iceberg que hundió al Titanic. ¿Acaso Messi no tendría que defender los colores de España? Sacando al galgo Gutiérrez, a Mascherano, que a pesar del grave error que cometió en el uno a uno sigue siendo un “león”, y el “pipita” Higuaín que demostró que de francés no tiene ni la uña del dedo meñique, los demás dejaron (ya hace tiempo lo vienen haciendo) mucho que desear.
Cuando parecía que el pasaje para Sudáfrica era sólo para ir de visita, apareció él. El interminable, el inmortal Martín en medio de una lluvia torrencial, para empujarla y hacer delirar a todo un pueblo (sí señor lector, a hinchas de River también), que hasta ese momento, ardía en llamas.
El mismo que hacía una semana ingresó al libro Guinness por meter un gol de cabeza desde ¡42 metros!, el sábado hizo llorar (y mucho) a Maradona.
Contra Uruguay se sentará otra vez en el banco de suplentes. Frente a Perú fue el Dios de la lluvia. En “La batalla de Montevideo”. ¿Será el Dios de la guerra?
Contra Uruguay se sentará otra vez en el banco de suplentes. Frente a Perú fue el Dios de la lluvia. En “La batalla de Montevideo”. ¿Será el Dios de la guerra?
Y... que te puedo decir???
ResponderEliminarTENES RAZON!!! no hay otra!
Y que queres que te diga? ESO es un jugador!! Asi de viejo choto como todos lo ven, la manda a guardar todavia.
ResponderEliminarPara que el Gatito y el Borracho Pelotudo aprendan lo que es ser un buen jugador.
Bueno, hablando de tu laburo, la nota te salio muy bien. Tambien estube leyendo las de abajo, y algunas son muy graciosas (escribis como un hincha, periodista, pero bueno, es tu estilo).
Alguante Martin... Y Aguante Boca!!!