Ésta nota no tiene titulo ni foto y esto se debe a que ya no se encuentran palabras ni imágenes para describir esta dolorosa situación. Hace poco más de un mes que no hay textos nuevos en este blog. El motivo es que ya no estoy motivado como antes y mi sufrimiento se agranda cada semana, cada partido que te veo jugar, perder y humillarte más River. La verguenza se convirtió en tristeza, los insultos en llanto. La pregunta es ¿Se puede hacer algo para que vuelvas a ser el de antes?
Ese interrogante no lo sabe nadie. Lo que si sé es que más que nunca hay que ir a la cancha a alentar y no a insultar. ¿Acaso se soluciona algo cantando "Que se vayan todos, que no quede ni uno solo"? Passarella asumió hace cuatro meses la presidencia de un club totalmente devastado económicamente por culpa de dos negligentes y estafadores como José María Aguilar y Mario Israel. Astrada asumió la conducción de un equipo que estaba (y lo sigue estando) en llamas, mientras que otros técnicos se lavaban las manos como Poncio Pilatos o pedían sumas de dinero inalcanzables. Vos Ramón Díaz que te haces el samaritano diciendo que dirigirias gratis a River, sabes muy bien que cuando Israel te llamó, después de la renuncia de Gorosito, para ofrecerte ser el nuevo D.T, no agarraste no porque no querías saber nada con el aguilarismo, sino porque pediste dos millones de dólares.
Es cierto que muchos jugadores no deberían estar en el club (Cabral, Barrado, Abelairas, y otros más), pero culpar a los pibes de este pésimo momento futbolístico no es justo. Funes Mori se erró dos goles hechos en La Bombonera y los hinchas lo insultaron constantemente en el partido frente a Argentinos ¿El 9 es el culpable de la derrota en el superclásico? Un equipo sin alma, sin actitud perdió contra un rival que cuatro días después fue humillado por Chacarita. Los pibes tienen que poner el pecho y no saben como hacerlo porque no tienen experiencia. Insultamos a un jóven de 18 años e idolatramos a un alcohólico de 35 que no puede manejar ni su vida ¡Pensemos con la cabeza! Hay que asumir el triste presente y archivar los gloriosos momentos de la década del 90. El Ortega crack se transformó en lo que es. El "Monumental" no es más ése estadio donde todos venían a empatar. Hoy en día vienen, nos ganan, nos humillan, y no festejan porque para todos se le ganó a nadie.
Dicen que una nota sin título ni imágen no tiene sentido, no es nada. Y justamente eso es River, la nada misma